Tintorería Egara nace en Terrassa a mediados de los 50, en pleno despliegue de una de las etapas más fructíferas para el desarrollo industrial, económico y social de la ciudad. A partir de ese momento, el sector textil experimenta una notable expansión, entre ellos el tinte.
Dos de los socios que fundaron la empresa, Joan Rodó e Ignasi Galobart, ya venían del mundo de la tintorería y eran conocedores del negocio. El tercero de los socios y cuñado de Galobart venía de otro ramo, se dedicaba a la comercialización de vinos. En el año 1957 propuso a Ignasi Galobart y a Joan Rodó realizar una aportación de capital y dedicarse a teñir. Eran los inicios de una empresa, Tintorería Egara.
En junio de 1983, Armand Galobart, hijo de Ignasi Galobart, entra a trabajar en la compañía. Abogado de formación, llevó a cabo diversos cursos de postgrado en dirección de empresas y un curso de ennoblecimiento de textiles en la UPC.
En el año 1984, Tintorería Egara sufre una restructuración y cambia su denominación comercial a Tintes Egara. Se empieza a trabajar en una línea más orientada al diseño y a la investigación científica. La consigna de la empresa fue priorizar la imagen final de la prenda y se empiezan a trabajar diferentes estilos más modernos y desenfadados. Se empiezan a desarrollar coloridos de tendencias y procesos innovadores.
En el año 2016, Ignacio Galobart ingeniero industrial de formación, hijo de Armand Galobart se incorpora a la compañía como director de producción, previamente estuvo especializándose en diferentes sectores textiles, desde una empresa de curtidos ubicada en España, gestionando y optimizando un tinte en pieza en Bangladesh y llevando la comercial en el norte de Europa desde Inglaterra.
En el año 2018 se incorporó a la empresa Álvaro Arrebola con formación de RRHH, yerno de Armand Galobart, ocupando el puesto de director financiero de la empresa.
